Las plantas de tratamiento tienen como objetivo minimizar la carga contaminante presente en el agua. Por medio de procesos físicos, químicos y biológicos, se depuran las aguas hasta alcanzar la determinada calidad para su disposición final y sobre todo, para su aprovechamiento mediante el reuso del recurso.
Recordemos que las aguas residuales son todas aquellas que se han utilizado para cualquier proceso y se ha alterado su calidad. Estas provienen de la población, de comercios, de lugares públicos y de lugares recreativos.
Por lo tanto, las Plantas de Tratamiento son idóneas para ayudar al medio ambiente así como obtener otros beneficios que a continuación explicaremos:
- Agua procesada y limpia: los productos tóxicos y contaminantes se eliminan del agua y esta pasa a ser limpia y segura.
- Cuidado del medio ambiente: regresar al ambiente el agua libre de contaminantes sin duda es uno de los mejores beneficios, ya que se contribuye de gran manera y permite la conservación de los ecosistemas.
- Contribuye a la salud: gracias al proceso de las plantas de tratamiento, se eliminan virus y bacterias que pueden causar enfermedades en personas, fauna y flora.
- Reutilización del recurso: el tratamiento de aguas garantiza la reutilización del recurso hídrico ya que se coloca nuevamente en los ecosistemas y no se desperdicia.
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